¡15 corridas!


¡15 corridas! para Catalina, ha venido la anónima muy explosiva, lo quería poner patas arriba todo, y vaya si lo ha puesto, una lencería negra súper sexy, los tíos flipaban al verla, estaba nerviosa por si la iban a reconocer, y le di un buen antifaz, para que se olvidara de eso y se centrara en las pollas, y vaya si comía zipotes, gozaba como una golfilla, no hay nada mas morboso que ver a una chica de la calle, como la llenan de semen por todas partes, una profesional uno lo entiende, lo hace por dinero y para progresar en su carrera, pero una chica anónima y amateur, que lo haga por puro vicio, luego el novio le dará el beso de buenas noches, porque estaba empachada de tanto pijote.